ABC de la terapia con células madre

Para nadie es un secreto que los avances en la medicina, y en general de la ciencia, se producen con años de trabajo. Desde su descripción inicial en la década de los 70s, las células madre atrajeron la atención de la comunidad científica y de la población en general, alrededor de todo el mundo.

Su capacidad de multiplicación y diferenciación (especialización en células de tejidos específicos), fue el sustento para sugerir su utilidad terapéutica, con la expectativa de sustituir células perdidas en diferentes tejidos, por distintas circunstancias, lo cual guarda directa relación con el desarrollo de algunas de las más importantes enfermedades que hoy nos afectan.

50 años de investigación en el uso terapéutico de las células madre, evidentemente, han permitido responder preguntas importantes al respecto, pero, además, han redireccionado la expectativa generada en un principio.

La información disponible confirma la capacidad que estas tienen de sustituir células perdidas, pero, además, se ha hecho evidente su rol como “maestro de orquesta”, dirigiendo las células del tejido enfermo, en busca de alcanzar la armonía tisular, que permita recuperar la estructura y funcionamiento, y así, mejorar la calidad de vida de las personas.

Esta capacidad de dirección, por ejemplo, sustenta el uso de esta herramienta para el manejo de enfermedades autoinmunes e inflamatorias, incluyendo las formas graves del COVID-19, en lo cual nosotros hemos alcanzado resultados muy atractivos.

La seguridad y eficacia de esta, y otras propuestas de terapia celular, está directamente relacionada con las condiciones bajo las cuales sean producidas y manipuladas. Es indispensable garantizar la ausencia de microorganismos potencialmente infecciosos, incluyendo hongos, virus y bacterias, además de la caracterización de las células.

En TRUSTEM también hemos entendido que la simplicidad del uso de estos productos es uno de los pilares sobre los cuales se erige su seguridad como alternativa terapéutica. Con nuestras soluciones tecnológicas, podemos asegurar el transporte y manipulación de las células madre sin riesgo de contaminación. Esto nos ha permitido trabajar de la mano de más de 30 instituciones de la salud en Colombia, México, Estados Unidos y el Caribe, que han confiado en la terapia médica avanzada.

En TRUSTEM vivimos con pasión nuestra responsabilidad de trabajar por el desarrollo de alternativas de terapia médica avanzada segura, eficaz, accesible y fácil de usar.

Por: Carlos Hugo Escobar, director científico TRUSTEM.

Go to Top